El lujo, la innovación y la tradición se encuentran en Dubai, uno de los destinos más visitados del mundo árabe. Descubre cómo llegar desde Perú, qué lo hace único y qué debes saber antes de viajar.
¿Te preguntaste alguna vez dónde queda Dubai y por qué atrae a tantos viajeros? Esta ciudad futurista, ubicada en pleno desierto, recibe millones de visitantes que buscan vivir una experiencia diferente en Oriente Medio.
En este artículo te explicamos cómo llegar desde Perú, qué lugares no te puedes perder, qué moneda se usa y qué consejos tener en cuenta para viajar seguro.
Dubai queda en la costa del golfo Pérsico y forma parte de los Emiratos Árabes Unidos, una federación compuesta por siete emiratos. Así que si te preguntas si Dubai es un país o una ciudad, la respuesta es sencilla: es una ciudad-emirato ubicada en Oriente Medio.
Se encuentra en el continente asiático y limita con el emirato de Sharjah al noreste y con Abu Dhabi al sur. En cualquier mapa de Dubai notarás su posición estratégica y su cercanía con destinos clave como Omán, Arabia Saudita y el resto del golfo.
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Para llegar a Dubai desde Perú, puedes tomar un vuelo con una o dos escalas en Europa, Estados Unidos o el Medio Oriente. Las rutas más comunes parten desde Lima y hacen conexión en ciudades como Ámsterdam, Estambul, París o Doha.
El viaje suele durar entre 20 y 28 horas, dependiendo de la conexión y la aerolínea. El principal punto de entrada es el Dubai International Airport, uno de los más grandes del mundo.
Además de ser un centro financiero y tecnológico, Dubai es un destino turístico lleno de atracciones únicas. Aquí te dejamos cinco experiencias que no te puedes perder.
Con 828 metros de altura, el Burj Khalifa es uno de los íconos de la ciudad y un ejemplo del tipo de edificios de Dubai que desafían la ingeniería. Puedes subir hasta sus miradores en los pisos 124 o 148 y disfrutar de una vista panorámica inigualable.
La entrada se reserva en línea y conviene ir al atardecer para ver cómo el sol tiñe de dorado la ciudad y el desierto. Desde lo alto también se puede ver el espectáculo de fuentes danzantes del Dubai Mall.
Para entender el lado más tradicional de la ciudad, visita el barrio Al Fahidi, con construcciones de adobe, museos y casas de té. La Mezquita Jumeirah es una de las pocas abiertas a no musulmanes y ofrece visitas guiadas que explican la cultura local.
Caminar por estas calles es viajar al pasado de Dubai, mucho antes del boom del petróleo. Es una zona ideal para quienes buscan conocer la historia de la ciudad y su conexión con el Islam y las tradiciones emiratíes.
Uno de los centros comerciales más grandes del mundo, The Dubai Mall no es solo un lugar para compras. Tiene una pista de hielo, una cascada interior y el Dubai Aquarium & Underwater Zoo, con más de 30.000 animales marinos.
Además, el mall conecta directamente con la entrada del Burj Khalifa y alberga restaurantes, cines y atracciones para toda la familia. Es una visita ideal si viajas con niños o si quieres escapar del calor durante el día.
Dubai Marina es una zona moderna llena de rascacielos, restaurantes y canales artificiales. Puedes tomar un paseo en dhow (barco tradicional) al atardecer, ideal para ver la ciudad iluminada desde el agua.
También hay cruceros con cena incluida, perfectos para una experiencia más completa. Desde aquí se accede fácilmente a JBR Beach, otra zona muy popular para caminar, hacer compras o relajarse frente al mar.
A pocos kilómetros de la ciudad, el desierto te espera con dunas, campamentos beduinos y espectáculos nocturnos. Los safaris en 4x4 suelen incluir cena, paseo en camello y shows culturales.
Muchos tours también ofrecen sandboarding, tatuajes temporales con henna y shisha. Es una de las actividades más recomendadas para quienes visitan Dubai por primera vez y permite vivir una experiencia auténtica fuera del ambiente urbano.
La moneda de Dubai es el dirham emiratí (AED). Puedes cambiar dólares o euros en casas de cambio, aunque la mayoría de los comercios aceptan tarjetas. Evita cambiar en aeropuertos, ya que las tasas no son convenientes.
Dubai es un destino costoso, pero hay alternativas para distintos presupuestos. Si viajas con un plan ajustado, considera alojamiento fuera del centro y comidas en zonas menos turísticas.
La seguridad en Dubai es muy alta. Hay normas estrictas y baja criminalidad, pero es clave respetar las costumbres: evita gestos afectivos en público, vestimenta inapropiada y el consumo de alcohol fuera de lugares autorizados.
Aunque es moderna y turística, sigue siendo parte de una cultura conservadora. Infórmate antes de viajar para evitar malentendidos y disfrutar sin inconvenientes.
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