Descubre cuándo comienza la temporada de huracanes en el Atlántico, qué regiones se ven afectadas y cómo planificar tus viajes con seguridad durante esta época del año.
Cada año, entre junio y noviembre, hay ciclones tropicales en la cuenca del Atlántico que pueden convertirse en huracanes en varias regiones, desde la costa este de Estados Unidos hasta las islas del Caribe y Centroamérica.
Si quieres viajar por estas áreas, es fundamental que conozcas cuándo es la temporada de huracanes en el Atlántico y cómo prepararte adecuadamente. En esta guía, te proporcionamos información precisa basada en datos oficiales para que puedas tomar decisiones informadas sobre tus viajes.
Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos, la temporada de huracanes en el Atlántico se extiende oficialmente del 1 de junio al 30 de noviembre de cada año.
Sin embargo, el pico de actividad ocurre generalmente alrededor del 10 de septiembre, cuando las condiciones atmosféricas y oceánicas son más propicias para la formación de estos fenómenos.
Los huracanes que se forman en la cuenca del Atlántico pueden impactar múltiples regiones, dependiendo de su trayectoria. Estas son las zonas más vulnerables a tener en cuenta:
La costa atlántica estadounidense, desde Florida hasta Carolina del Norte, es una de las zonas más expuestas. Estados como Florida, Carolina del Norte, Carolina del Sur y Georgia experimentan impactos recurrentes, especialmente durante agosto y septiembre.
Según datos del Centro Nacional de Huracanes, en 2024, cinco huracanes tocaron tierra en territorio continental de Estados Unidos: Beryl, Debby, Francine, Helene y Milton.
Los estados que bordean el Golfo de México —Texas, Luisiana, Mississippi y Alabama— pueden sufrir huracanes intensos. La Península de Yucatán en México también recibe impactos directos con frecuencia.
Esto es porque las aguas cálidas del Golfo proporcionan condiciones ideales para la intensificación rápida de estos sistemas de tormentas.
Cuba, República Dominicana, Puerto Rico, Jamaica y las Bahamas se encuentran directamente en las trayectorias más comunes de los huracanes del Atlántico.
Países centroamericanos como Honduras, Nicaragua y Belice también experimentan los efectos de estas tormentas, particularmente las lluvias torrenciales e inundaciones asociadas.
Las Bermudas, un archipiélago del Atlántico norte que pertenece a Gran Bretaña, recibe impactos directos de huracanes con cierta frecuencia.
Las Islas Azores en Portugal y, ocasionalmente, la costa canadiense del Atlántico también pueden verse afectadas, en particular, cuando los sistemas se desplazan hacia el norte.
Aunque la temporada oficial se extiende por seis meses, agosto, septiembre y octubre concentran la mayor actividad ciclónica.
Ocasionalmente, se han registrado huracanes fuera de las fechas oficiales.
La temporada de huracanes en el Caribe afecta más que nada a Cuba, República Dominicana, Puerto Rico, Jamaica y las Bahamas. Estos destinos, famosos por sus playas caribeñas, están ubicados dentro del llamado "cinturón de huracanes".
Sin embargo, las islas ABC (Aruba, Bonaire y Curazao), cerca de la costa venezolana, raramente experimentan impactos directos de huracanes. Trinidad y Tobago, Barbados y Granada también tienen menor probabilidad de ser afectadas por su ubicación al sur del cinturón de huracanes.
Si quieres o debes viajar durante la temporada de huracanes, sigue estas recomendaciones para minimizar riesgos:
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